Juan R. Rallo expone cómo Sánchez (PSOE) está expulsando de España a los inversores extranjeros (aprovechando el estado de alarma), lo que supone un freno a la recuperación de la economía española (con lo que ello conlleva para la generación de ahorro e inversión, la creación de empresas y la recapitalización de otras para que no acaben cerrando, el crecimiento del empleo, el aumento de salarios...).
El gobierno impide así una de las condiciones necesarias para dicha recuperación, tal como mostraba en mi análisis reciente donde exponía qué necesitábamos (y qué no) para una rápida, fuerte y sostenible recuperación.
Y el problema grave es que además el real decreto donde se carga la libre circulación de capitales desde el extranjero a España no es tampoco temporal (no es régimen transitorio sino permanente), que no solo es ora muestra de deriva autoritaria (todo pasa por el gobierno) sino que arruina más al país porque el capital extranjero no podrá volver a España en régimen de libertad.
Como bien afirma, estamos ante otro ejemplo de cómo "los políticos instrumentalizan las situaciones de pánico para ganar poder a costa de la sociedad y una vez lo han tomado es muy complicado arrebatárselo, salvo que eleve muchísimo el coste político de estas decisiones autoritarias y pauperizadoras".
"El Gobierno de PSOE-Podemos ha eliminado la libertad de entrada de capitales en España. La mayoría de grandes inversiones procedentes de fuera de la Unión Europea deberán contar con la arbitraria autorización del Ejecutivo. "
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