jueves, 4 de febrero de 2010

Estupenda reflexión sobre la problemática creciente del Islam. (Islam, Oriente Medio. 23)

Recomiendo la reflexión del Dr. Emanuel Tanay, recogida por Ironwill:

"Esta es una de las mejores explicaciones sobre la situación de los musulmanes radicales. Las referencias a historia pasada son precisas y claras. No es largo, es fácil de entender, y bien vale la pena leerlo. El autor es el Dr. Emanuel Tanay, un conocido y muy respetado psiquiatra.
Un hombre, cuya familia era de la aristocracia alemana antes de la Segunda Guerra Mundial, propietarios de una serie de grandes industrias y haciendas.

Cuando se le preguntó cuántos alemanes eran realmente nazis, la respuesta que dio puede guiar nuestra actitud hacia el fanatismo. "Muy pocas personas eran realmente nazis", dijo,"pero muchos disfrutaban de la vuelta del orgullo alemán, y muchos más estaban demasiado ocupados para prestar atención. Yo era uno de los que pensaba que los nazis eran sólo un puñado de locos".

Así que, la mayoría simplemente se sentó y dejó que todo sucediera. De repente, antes de que nos diéramos cuenta, eran nuestros dueños, ya habíamos perdido el control, y el “fin del mundo” había llegado. Mi familia lo perdió todo. Terminé en un campo de concentración y los Aliados destruyeron mis fábricas.

Se nos dice una y otra vez por los "expertos" y "cabezas parlantes" que el Islam es la religión de la paz y que la gran mayoría de los musulmanes sólo quieren vivir en paz. Aunque esta afirmación sin reservas podría ser cierta, es totalmente irrelevante. Es todo propaganda sin sentido, con la intención de hacernos sentir mejor, y con la intención en cierta forma de empequeñecer el espectro de fanáticos que arrasa en todo el mundo en nombre del Islam.

El hecho es, que los fanáticos rigen el Islam en este momento de la historia. Son los fanáticos los que se manifiestan. Se trata de los fanáticos los que llevan a cabo cualquiera de las guerras abiertas en todo el mundo. Se trata de los fanáticos los que sistemáticamente masacran a cristianos o grupos tribales en África y están tomando gradualmente todo el continente en una ola islámica. Son los fanáticos los que usan bombas, decapitan, asesinan, secuestran o matan por honor. Se trata de los fanáticos los que se apoderan de mezquita tras mezquita. Se trata de los fanáticos los que suspicazmente difunden la lapidación y la horca para las víctimas de violación y los homosexuales. Se trata de los fanáticos los que enseñan a sus jóvenes a matar y a convertirse en terroristas suicidas.

La dura y cuantificable realidad es que la mayoría pacífica, la "mayoría silenciosa", se doblega y se retrae por lo tanto es irrelevante.

La Rusia comunista estaba formada por rusos que sólo querían vivir en paz, sin embargo, los comunistas rusos fueron los responsables del asesinato de cerca de 20 millones de personas. La mayoría pacífica eran irrelevantes.
La enorme población de China también era pacífica, pero los comunistas chinos lograron matar a la asombrosa cifra de 70 millones de personas.

El individuo japonés medio antes de la Segunda Guerra Mundial no era un sádico belicista. Sin embargo, Japón asesinó y masacró marcando su camino en el sur de Asia Oriental en una orgía de muerte que incluyó el asesinato sistemático de 12 millones de civiles chinos, la mayoría muertos por la espada, palas y bayonetas.

¿Y quién puede olvidar Rwanda? Las lecciones de la historia son con frecuencia increíblemente simples y contundentes, sin embargo, para todos nuestros poderes de la razón, con frecuencia pasamos por alto los puntos menos complicados y mas básicos.

Los Musulmanes amantes de la paz se han hecho irrelevantes por su silencio.
Se despertaran un día y descubrirán que los fanáticos los poseen, y el final de su mundo habrá comenzado.

Los alemanes, amantes de la paz, japoneses, chinos, rusos, ruandeses, serbios, afganos, iraquíes, palestinos, somalíes, nigerianos, argelinos, y muchos otros han muerto a causa de la mayoría pacífica que no dijo nada hasta que fue demasiado tarde. En cuanto a nosotros los que vemos como todo se desarrolla, debemos prestar atención al único grupo que cuenta - los fanáticos que amenazan nuestra forma de vida.

Por último, cualquiera que duda de que el problema es serio y hace caso omiso, está contribuyendo a la pasividad que permite que tales problemas se expandan. Por lo tanto, amplifíquese a sí mismo un poco, divulgue la información, y así sucesivamente! Esperemos que miles de personas, en todo el mundo, lean y piensen en ello, - antes de que sea demasiado tarde."

De aquí:
http://alianzacivilizaciones.blogspot.com/2010/02/para-reflexionar.html

1 comentario:

  1. Dramáticamente cierto. Los actores de la historia nunca son los buenistas pasivos. Los actores son quienes responden a la guerra con la guerra, no con pancartas. Lupus est homo homini, quien no lo entienda así estará perdido. Las guerras son consustanciales a la humanidad, ignorar la respuesta a la agresión es pasar a ser víctima propiciatoria. La estulticia se ha instalado en la sociedad española, en los gobiernos de esta desdichada nación nuestra. Dios nos ampare. Tuvimos una ocasión de manifestar la unión y el rechazo a nuestra propia masacre un once de marzo y la desaprovechamos mostrando la revancha y el odio pero no hacia quienes fueron los asesinos sino hacia nosotros mismos. Vaya ejemplo de coraje. En lugar de perseguir a los que ahora se denomina autores intelectuales hemos transgredido con un juicio de pacotilla organizado a la carta de los masones de turno que no querían bajo ningún concepto llegar al fondo del asunto.

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