Luís Losada analiza la aprobación anti-israelí llevada a cabo por 40 ayuntamientos españoles dirigidos a boicotear al país y subvencionar a los boicoteadores, promoviendo como en la Alemania nazi, la discriminación pública de origen ético y racial así como el odio
Artículo de Actuall:
Cuarenta ayuntamientos españoles aprobaron el pasado mes de enero sendas declaraciones institucionales anti-israelíes. La declaración de “espacio libre de apartheid israelí” no sólo apoya el Estado de Palestina sino que compromete a los consistorios a “adoptar las medidas legales oportunas para que los procesos de contratación y compra incluyan previsiones que impidan contratar servicios o comprar productos a empresas cómplices de violaciones de Derecho Internacional”.
Además, mediante dicha declaraciones, los consistorios se comprometen a “no suscribir ningún convenio o acuerdo con instituciones públicas, empresas y organizaciones que participen, colaboren u obtengan beneficio económico de la violación del derecho internacional”.
Por último, los ayuntamientos se comprometen a colaborar con el movimiento Boicot, Desinversiones y Sanciones (BDS). En resumen, eufemismos para boicotear a Israel, sus empresas, sus artistas y sus académicos y subvenciones para los boicoteadores.
Sentencias que critican las declaraciones
El presidente de la asociación Acción y Comunicación sobre Oriente Medio (ACOM), Ángel Guillermo Mas Murcia, ha llevado a los tribunales las 40 declaraciones municipales. Y de momento, la justicia le está dando la razón.
La sentencia del 25 de mayo de lo contencioso-administrativo de Oviedo anula por discriminatoria la declaración del Ayuntamiento de Langreo (Asturias) de 28 de enero.
El fallo recuerda la directiva 2000/43/CE de 29 de junio en la que se consagra el principio de igualdad y se sancionan las discriminaciones de origen ético o racial.
La sentencia también recuerda que el artículo 510 de nuestro Código Penal sanciona las actitudes o comportamientos racistas o antisemitas, la incitación al odio, el hostigamiento, la discriminación o la violencia por razón de religión, creencias, situación familiar, orientación sexual, etc.
La juez también recuerda la resolución del Tribunal Europeo de Derechos Humanos de Estrasburgo de 16 de julio de 2009. El caso Willem vs Francia hace referencia a un caso similar.
Un alcalde francés decide boicotear zumos de fruta provenientes de Israel. Estrasburgo le recuerda al alcalde que tiene obligación de mantener neutralidad y su deber de “mantener reserva en los actos que comprometen a las instituciones”.
Además, recuerda que los “los fondos públicos no puede gastarse en una lógica discriminadora”.
El juzgado de lo contencioso-administrativo de Oviedo concluye que la declaración de Langreo “sin lugar a dudas incita a la discriminación”.
Es el mismo análisis de la Fiscalía en el caso del ayuntamiento de Gijón. “Sin necesidad de hacer un análisis complejo (…) vulnera el derecho a la igualdad y la no discriminación” consagrados en el art. 9 de nuestra Constitución y en los tratados internacionales.
Por último, el ayuntamiento de Avilés (Oviedo) se allana y el juzgado de lo contencioso-administrativo de Oviedo resuelve en sentencia de 24 de febrero la nulidad de la resolución municipal de 12 de enero.
El caso de Gijón es significativo porque se trata del único de los 40 ayuntamientos ‘antisemitas’ no gobernado por la izquierda.
El Club de los Viernes ha iniciado una campaña en CitizenGO dirigido a la alcaldesa, Carmen Morrión Entrialgo, pidiéndole la revocación del acuerdo.
Además, este jueves está convocada a las 20:00 una conferencia titulada “La sociedad civil frente al boicot antisemita contra Israel” impartida por el propio Ángel Mas, presidente de ACOM. Tendrá lugar en la Sala de Cultura de Monte de Piedad, Plaza de Monte de Piedad, s/n Gijón. “Ya hemos avisado a la Policía porque sabemos que hay intención de boicotearla”, señala a Actuall.com el presidente del Club de los Viernes, Javier Jové.
Permanezcan atentos a las pantallas.
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