Ciertamente, escuchar a Bernardos es como fumar tres paquetes al día. Te quita años de vida, especialmente a nivel intelectual. Y es que es dificil hablar sin parar de decir una sola verdad y desconociendo tanto sobre aquello que habla.
Y eso, unido a la demagogia y falacias personales nivel Dios que emplea, hacen un cóctel realmente espectacular y difícilmente digerible...
No hay comentarios:
Publicar un comentario