Elentir muestra la prostitución, tráfico de drogas...que se vienen cometiendo en los centros de menores tutelados por el Estado, a raíz del escándalo de la red de prostitución en estos centros que ha visto la luz en Mallorca, y que ha sido tan bien tapado por los medios y partidos políticos (bajo su responsabilidad) mientras pretenden apartar a las familias (para esto sí que han dedicado todos sus recursos y tiempo) de la educación de sus hijos, para apoderarse de ellos.
Artículo de Contando Estrelas:
Estos últimos días ha habido en España un intenso debate sobre la libertad de educación, con políticos y medios de izquierdas intentando socavar el papel de la familia como educadora.
Al escuchar a una socialista como la ministra de Educación Isabel Celaá diciendo que «no podemos pensar de ninguna de las maneras que los hijos pertenecen a los padres», muchos nos hemos acordado de los totalitarios que en el siglo pasado pretendieron reemplazar a la familia por el Estado en el papel de educador, con nefastas consecuencias.
El escándalo de la red de prostitución en centros de menores de Mallorca
Curiosamente, ha habido otro asunto muy grave en la actualidad española pero que no ha tenido tanta atención por parte de los medios, y que los políticos de izquierda han orillado como si fuese un asunto incómodo. El 13 de enero saltó la noticia de 16 casos de prostitución infantil -1 niño y 15 niñas- en centros públicos de menores de Mallorca. Este escándalo se destapó a raíz de la violación de una niña de 13 años las pasadas navidades, un hecho por el que han sido detenidos un joven de 19 años y cinco menores de edad de entre 15 y 17 años. Unos días más tarde se supo que la niña ya había denunciado tres violaciones en el último año.
Los trabajadores de los centros venían denunciándolo desde hace tres años
El 15 de enero, esta trama de prostitución salió por fin a la luz mostrando algo realmente espantoso: que la prostitución infantil se extiende a la totalidad de las niñas acogidas en algunos centros de Mallorca. Los trabajadores de los centros vienen denunciándolo desde hace tres años a la Policía, y ésta ha venido investigando las denuncias, pero el Instituto Mallorquín de Asuntos Sociales (IMAS) no hizo nada, por lo que está siendo el blanco de numerosas críticas. Hay que decir, por si alguien desconoce este dato, que el IMAS depende del Consejo Insular de Mallorca, que desde 2015 está controlado por un tripartito de izquierdas formado por el PSOE, Podemos y los izquierdistas de Més per Mallorca. Da la casualidad de que dos de esos partidos son los que están encabezando ahora la ofensiva del Gobierno de Sánchez para que el Estado sustituya a los padres como educador. Tal vez sea ésta la razón por la que la mayoría de las tertulias y programas televisivos pasan de puntillas sobre este asunto.
Otro escándalo que salpicó de lleno a la Generalidad Valenciana
Para más inri, el escándalo de prostitución infantil en Baleares no es precisamente un caso aislado. El pasado mes de diciembre el exmarido de Mónica Oltra, consejera de Igualdad y Políticas Inclusivas de la Comunidad Valenciana (es decir, la máxima responsable de la red de centros públicos de menores), fue condenado por abusar sexualmente de forma continuada de una niña tutelada por la Generalidad Valenciana en un centro de acogida. El tribunal recriminó a la directora del centro de menores que ni siquiera preguntase a la niña por lo ocurrido ni la derivase a otro centro al tener conocimiento de los hechos, y también recriminó a la psicóloga de la Sección del Menor de la Dirección Territorial de Igualdad por no dar cuenta a la Fiscalía de Menores. Los hechos ocurrieron estando el PSOE al frente de la Comunidad Valenciana, en un Gobierno de coalición con los separatistas de izquierdas de Compromís. Una vez más, los grandes medios no dedicaron a este asunto ni remotamente tanta atención como a arremeter contra el pin parental. ¿Habría ocurrido lo mismo si un caso así hubiese afectado a un gobierno de derecha?
Otros ejemplos ocurridos en centros de menores en los últimos años
A los anteriores escándalos hay que añadir otros que han ido surgiendo en los últimos años y que aparecen cuando rebuscas un poco en las hemerotecas:
- El 29 noviembre 2019 fue detenida en Alicante una mujer acusada de facilitar drogas a niñas acogidas en centros de menores, a las que instaba a prostituirse. La detenida, de 19 años, incluso utilizaba a las menores para cometer robos.
- En diciembre de 2018, un ciudadano de Bolivia fue condenado por inducir a prostituirse a dos menores tuteladas en un centro de la Generalidad catalana en Tarragona. Una de las menores accedió a prostituirse.
- En mayo de 2017 saltó un caso de prostitución en un centro de menores de Monteolivete, en Valencia. La consejera Mónica Oltra reconoció el caso y reconoció también el despido de un tutor de otro centro de menores en Segorbe por suministrar droga y abusar sexualmente de una menor.
- En marzo de 2017 fue liberada en Navalcarnero (Madrid) una niña de 14 años obligada a prostituirse tras fugarse de un centro de menores a instancias de una red de prostitución. La menor había sido captada por esa organización criminal cuando estaba en un centro de acogida de Castilla y León.
- En noviembre de 2016 la Policía vasca detuvo a un psicólogo por su presunta vinculación con una red de prostitución de menores tutelados por la Diputación de Álava. El detenido fue acusado de abusos sexuales a una decena de menores, y se investigó también si los abusos sirvieron para producir pornografía infantil.
- En agosto de 2012 saltó a los medios locales otro posible caso de prostitución en un centro de menores de Caminomorisco (Cáceres), a raíz de la fuga de cuatro niñas de ese centro.
Introducir a niños en el sexo a edades tempranas: ¿qué podía salir mal?
Los que hemos visto son algunos de los casos que han llegado a salir a la luz. Recordemos que en Mallorca venían ocurriendo estas cosas desde hace tres años sin que se convirtiesen en noticia. ¿En cuántos otros centros de menores puede estar ocurriendo lo mismo? Y así mismo, ¿con qué cara le dice el Estado a los padres que va a educar a sus hijos, mientras ocurren estas cosas en centros tutelados por el Estado? Y para colmo, lo que la izquierda pretende hacer con su adoctrinamiento ideológico es introducir en el sexo a niños de muy corta edad: ¿qué podía salir mal? ¿Será por eso, también, que asuntos tan siniestros como los que acabamos de ver no tienen tanto eco mediático, no vayamos a apreciar una relación entre esa sexualización temprana de los niños y esos escándalos?
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