Algunos pueden pensar que son porcentajes bajos. Nada más alejado de la realidad. Dicho porcentaje sobre el patrimonio puede equivaler a un impuesto superior al 100% sobre la renta del ciudadano, como ejemplifica en detalle.
El resultado de tal medida será desastroso para la recuperación económica y como se ha demostrado en tantas ocasiones contraproducente, que llevará a la descapitalización de la economía, que es justo todo lo que necesita nuestra economía para salir adelante.
Y por otro lado, las estimaciones de recaudación de Podemos son sencillamente ciencia ficción (dice de recaudar 11.000 millones €, que por otra parte no llega al 10% del déficit estructural que tendrá España a partir del 2021 -no ya en 2020-). De hecho, solo en el MEJOR de los casos alcanzará el 18% de dicha cifra (alrededor de 2.500 millones) y que provocará a su vez fuga de capitales, cambios en las sedes fiscales de muchísimas empresas (hacia países más atractivos y sin dichos impuestos confiscatorios, y no existe NINGÚN país con un impuesto remotamente semejante) y que fortunas de otros países no se fije en España yendo a otros lugares (como Portugal). Como indica la experiencia (y por ejemplo hay datos de seguimiento pormenorizado de qué ocurrió por ejemplo en el caso de Cataluña con la aplicación del impuesto de patrimonio en 2011, lo normal incluso es que la recaudación caiga por diversos motivos. Este hilo es muy ilustrativo al respecto). Los que se vayan porque dejarán de tributar aquí, y los que se queden porque les descapitalizarás a ritmos insostenibles, pauperizando a la sociedad, devorando al tejido empresarial del país.
Es decir, dado el brutal déficit estructural de España, se llevarán a cabo fuertes recortes del gasto y amplias subidas de impuestos a TODOS los ciudadanos. Y todo esto aún recaudando la absurda e inflada cifra que dice Podemos (lo esencial es la propaganda), y que nunca superó en España los 2.500M €.
Vamos directo al empobrecimiento masivo del país. Hacia la venezolización del país. Pero España era distinta...
Y si en condiciones normales esta idea es absolutamente descabellada (gravar de manera tan agresiva la acumulación de capital y la inversión en un país es ir directo al estancamiento económico, el freno a la productividad, el desempleo, la insolvencia y la pauperización de salarios), en la situación actual donde lo esencial para salir de la crisis es capital (es decir financiación e inversión), el perseguirlo con tanta saña a quien lo tenga en el país es un auténtico disparate que nos condena al desastre.
Y en estas manos estamos...
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