Como se muestra, la situación actual no se ha visto desde 1.910, aunque ciertamente la situación es mucho más dramática y preocupante por dos hechos.
En primer lugar, que dicha ratio supera ya el 100% si se incluye la deuda pública que no se computa (ejemplo de la deuda de empresas públicas con menos del 50% de participación...) y en segundo lugar que dicha ratio sería todavía mayor (y al ritmo de aumento de las cifras oficiales alcanzará el 100% este mismo 2013)
Fuente de los gráficos: Diego Sanchez de la Cruz
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