martes, 18 de junio de 2013

Cada español nace ya con una deuda de 20.000 euros al crecer un 19% la del Estado. (Política, Economía. 1.672)

Normal, con esta "austeridad" tan espectacular que padece España. La deuda no para de subir sin freno alguno y de manera disparatada.

Los datos permiten desmontar de manera contundente las mentiras al respecto de la austeridad.
Y viendo la evolución de la deuda desde el año 2007, se echa uno para atrás.

Este dato es bien demostrativo: En el 2007, la deuda del total de Administraciones Públicas se situaba en 382.307 millones. Al final del 2011, con el cambio del gobierno, se situaba en 796.817 millones. Al cierre del 2012 ya alcanza los 922.828 millones de euros.

Pero el problema no es del gasto público y del endeudamiento sin fin, al parecer es de la austeridad.
Cuando el país suspenda pagos y quiebre, también será de la austeridad...

Como publica El Mundo:

"Al cierre del primer trimestre, la deuda de las administraciones públicas españolas se disparó hasta el 88,2% del PIB, cuatro puntos más que en 2012. La cifra asciende a 922.828 millones de euros, 148.000 más que hace 12 meses tras un brutal aumento del 19%. Mientras el déficit baja muy lentamente, cada español debe ya el equivalente a 20.000 euros.
De la cifra total, esos 922.828 millones, 189.590 millones corresponden a las comunidades autónomas, que son las que más crecimiento relativo han experimentado. Son 43.194 millones más que un año antes, un aumento de casi el 30%. No de deuda emitida recientemente, pues han tenido el mercado cerrado con pocas excepciones (Aragón, País Vasco Galicia y sobre todo Madrid). Pero sí bancaria, incluidas refinanciaciones, préstamos de la administración central (principalmente el Fondo de Liquidez Autonómica, que supuso un 0,3% del PIB sólo en el primer trimestre de este ejercicio) o de deudas con proveedores.
Según los datos hechos públicos ayer por el Banco de España, la administración central sigue concentrado el grueso del monto total. Y más tras un primer trimestre cargado de subastas. El Estado ha pasado de tener una deuda de 655.365 millones de euros a 796.817 millones en los últimos 12 meses, el 76,2% del PIB.
Pese a que España sigue por debajo de la media europea y de algunos de los motores del continente, como Alemania, el ritmo de crecimiento es vertiginoso. En 2007, al inicio de la crisis, el endeudamiento del total de las administraciones era de 382.307 millones. Al cierre de 2011 con el cambio de Gobierno, la cantidad era de 736.468. Desde entonces, y mientras el déficit bajaba lentamente, la deuda se disparaba.
En el primer trimestre, la deuda del FLA, el Fondo de amortización del déficit eléctrico (Fade) y del Frob se incrementó en más de un punto porcentual. Y «con todo, la deuda ha crecido 1,5 puntos por encima del déficit registrado en el mismo periodo», según BBVA Research.
Guillermo Santos, director de Estrategia de iCapital, considera que estos niveles son «muy preocupantes porque nos restan capacidad de maniobra y suponen un lastre para nuestro crecimiento». Y señala que sólo será sostenible mientras la crisis del euro no se acentúe, «pero no eternamente. Si no tomamos medidas para frenar el incremento de la deuda, nuestro bajo crecimiento puede llevarnos a una reestructuración de emisiones vivas con un alargamiento de plazos. El coste de nuestra financiación se encarecería mucho pues seríamos bono basura».
Ignacio Zubiri, catedrático de la Universidad del País Vasco, estima que «el 88,2% es una cifra elevada, especialmente porque no es el final de la historia. Según la senda de déficit pactada con la UE, de aquí al 2016 aumentará en por lo menos otros 15 puntos, más lo que pudiera costar un segundo rescate bancario». Pero señala que «España paga ahora un 3% del PIB en intereses (un 6,5% del gasto público total) que son unas cifras equivalentes al promedio del euro área. Aunque es casi el doble que hace dos años, España ha convivido con cifras similares de intereses en el pasado».
¿Qué cantidad es más preocupante? Las agencias de calificación llevan mucho tiempo preocupadas por las CCAA. Pero Zubiri señala que «desde que comenzó la crisis, el endeudamiento de las comunidades (que son quienes realizan el 35% del gasto público total) ha aumentado en 12 puntos del PIB. El del Estado (que realiza sólo el 20% del gasto) en 45 puntos. El déficit del Estado es preocupante porque es muy elevado en relación a su capacidad financiera real». Y porque el objetivo del año es el 91,4%, lo que minimiza el margen.
En los últimos meses, la recuperación de los mercados ha permitido mejorar esa capacidad financiera del Estado español. Sin embargo, no lo suficiente para convencer Standard & Poor’s (S&P), que ayer decidió mantener su amenaza de degradar la nota de España al bono basura. La agencia de calificación estadounidense, que en octubre concedió a la deuda soberana española un aprobado raspado (BBB-) justificó su decisión al recordar que la economía española sigue estando lastrada por su «alto endeudamiento» y las pocas perspectivas de crecimiento a medio plazo, pues prevé que el PIB español se contraiga un 1,5% en 2013, antes de «recuperarse lentamente» y crecer un 0,6% en 2014.
El Gobierno tenía la esperanza de que S&P revisara la perspectiva de España desde negativa a estable, como ya ha hecho con otros países, como Irlanda, afectados por la crisis del euro. Sin embargo, los analistas de la agencia estadounidense temen que la agenda de reformas que tiene pendiente el Gobierno sufra ante un posible debilitamiento del apoyo político y de sus reflexiones se desprende que tampoco termina de confiar en la determinación de los líderes del euro a zanjar esta crisis."

Fuente: El Mundo

No hay comentarios:

Publicar un comentario

Twittear