La frase del día de Pepe Blanco al respecto de la educación:
“Lo que no hay derecho es que yo, que tomé la decisión de llevar a mis hijos a un colegio privado tenga una desgravación fiscal al año de 900 euros mientras se están recortando profesores en la enseñanza pública”. Lo ha dicho hoy José Blanco, tras reconocer que lleva a sus hijos a un colegio privado.
Me fijo en esta cita porque resume bien la raíz del hipócrita maltrato socialista a la enseñanza privada. El Artículo 27 de la Constitución afirma: “Todos tienen el derecho a la educación. Se reconoce la libertad de enseñanza.“ Así mismo, el Artículo 26 de la Declaración Universal de los Derechos Humanos, suscrita por España, señala lo siguiente: “Los padres tendrán derecho preferente a escoger el tipo de educación que habrá de darse a sus hijos.“ Así pues, cuando el Ministro de Fomento o cualquier otro padre elige la enseñanza privada para escolarizar a sus hijos, está ejerciendo una de sus libertades más elementales.
Los padres de la privada, obligados a pagar dos veces por la educación
Sin embargo, determinados gobiernos insisten en penalizar a los que deciden ejercer ese derecho eligiendo un colegio privado para sus hijos. A esos padres se les hace pagar dos veces por la educación: y es que pagan el colegio de sus hijos, a menudo haciendo enormes sacrificios, y además pagan -vía impuestos- la educación de los hijos de los demás. Esto no sólo se ignora desde las filas del PSOE, sino que se considera lo exigible, pero no en términos jurídicos, sino puramente políticos. Es de sobra conocida la aversión ideológica del socialismo hacia la enseñanza de iniciativa social, quizás porque es una opción educativa sobre la que no pueden ejercer un control político e ideológico tan férreo como el que ejercen sobre la enseñanza pública. Es esa ansia de control, y no el derecho de los padres, la que orienta las políticas socialistas en materia de educación.
La campaña de desprestigio de los socialistas contra los padres
Teniendo en cuenta lo anterior, no ha de extrañarnos que allí donde ha gobernado el PSOE, el maltrato a la enseñanza de iniciativa social ha sido una constante, y a los socialistas nunca les ha importado que con ello estuviesen limitando la capacidad de elección de los padres sobre la educación de sus hijos. Antes bien, desde el PSOE se han empeñado en desprestigiar a los padres en su función de educadores: en 2007 Zapatero les acusó de la pésima calidad educativa que hay en España tras las sucesivas leyes educativas de los socialistas, y en enero de este mismo año uno de los ideólogos del PSOE, Gregorio Peces-Barba, iba aún más lejos, afirmando: “Los padres no se han preocupado nunca de la educación de los hijos”. El fin de estos ataques a las familias lo han dejado claro los propios socialistas estos últimos siete años: minar el derecho de los padres a decidir sobre la educación de sus hijos.
No todos los padres de la privada son ricos como José Blanco
Que la Comunidad de Madrid intente paliar esa injusticia es lo que molesta a Blanco y a sus colegas del PSOE, tal vez porque los dirigentes socialistas tienen menos problemas que el resto de los españoles para pagarse un colegio privado. A modo de ejemplo, como ministro José Blanco tiene un sueldo de 74.054 euros (más de 12 millones de pesetas) y un patrimonio de 239.536 euros (casi 40 millones de pesetas). Posee además dos viviendas en Madrid y una en la provincia de Pontevedra (supongo que ésta última es el flamante piso en “Villa PSOE”). Entiendo que alguien con el nivel de vida de este señor no tenga problemas para pagarle a sus hijos un colegio privado, pero no es el caso de muchos padres que tienen que asumir muchos sacrificios para ejercer su derecho. A lo que no hay derecho en España es al maltrato socialista a la enseñanza privada. Un maltrato hipócrita, como vemos, pues luego algunos de los que vituperan esa opción educativa son los mismos que la eligen para sus hijos.
La solución que incomoda a cierta casta dirigente: el cheque escolar
Hay que decir que existe un sistema que permitiría acabar no ya con los ataques sistemáticos de los socialistas contra sus padres y sus derechos -una obsesión ideológica que va a ser difícil de cambiar-, sino con la manipulación política de la enseñanza y con el maltrato de cierta casta dirigente contra la enseñanza privada. Ese sistema es el cheque escolar. Podéis encontrar más información sobre el mismo pulsando aquí. Si hasta ahora los políticos han rechazado esta solución es porque mermaría considerablemente su capacidad de manipular la educación como lo han hecho hasta ahora, pero ésa es la vía para dar más libertad a los padres, permitir que todos -sean pobres o ricos- puedan elegir la educación que desean sus hijos y premiar a los colegios que se esfuerzan en dar una educación de calidad. ¿Cuánto tiempo más van a estar los políticos poniendo pretextos para negar esta solución?"
Fuente: Contando Estrelas
Por otra parte, cabe demostrar una mentira más de este personaje, que mintió al decir que llevaba a sus hijos a una escuela privada por ser biligüe, algo que no podía en la pública, cuando en Madrid en esa zona (entre Las Rozas y Las Matas), existen 7 escuelas públicas bilingües, de las 10 que hay, y en las que nunca ha solicitado plaza.
No hay comentarios:
Publicar un comentario