lunes, 7 de febrero de 2011

La rigidez del mercado laboral en España y sus efectos sobre el empleo. (Política, Economía. 271)

Esta semana, Angela Merkel ha visitado España reuniéndose con el Gobierno y los sindicatos españoles para ver la marcha de las reformas llevadas a cabo proponiendo más para mejorar la situación de paro en España, superior al 20%.

Qué es lo que se plantea (y que se viene pidiendo desde hace mucho tiempo?)

-Supresión de las cláusulas de revisión salarial en España y vinculación del salario a la productividad:

La tasa de inflación es más elevada cuanto mayor es el grado de indiciación de los salarios a la inflación y la persistencia de una alta inflación es mayor cuanto más se indician los salarios a la misma, de forma que las desviaciones del IPC tenderán a ser más duraderas en aquellos países donde existe un mayor nivel de indiciación salarial, como ocurre en España. De hecho, y como obverva el Banco Central de España, una de las características «más peculiares» del mercado laboral español, no observada en la mayoría del resto de países europeos, es la presencia de cláusulas de salvaguarda en la mayor parte de los convenios colectivos que se firman, lo que origina «un elevado grado de indiciación automática de los salarios a incrementos en los precios».
Y cerca del 75% de los trabajadores con convenio está protegido por estas cláusulas frente a las desviaciones del IPC, lo que contrasta con el de la mayor parte de los países europeos, que presentan cifras inferiores al 25%. Estas clausulas convierten los aumentos transitorios de la inflación en permanentes.

Actualmente en España, el acuerdo de negociación colectiva vigente para 2010-2012 recomienda un incremento salarial del 1% para 2010, de entre el 1% y el 2% para 2011, de entre el 1,5% y el 2,5% en 2012, y establece la aplicación de cláusulas de revisión salarial a partir de ese año para recuperar el poder adquisitivo perdido en la etapa anterior.

Cuál es la situación española?

La situación española es que nuestra economía es muy poco productiva y competitiva, como muestra el gráfico ingerior (compárese con Alemania, DE), lo que viene reforzado por un mercado laboral muy rígido.
















Gráfico: Evolución relativa de la competitividad en la Eurozona. Índice: 1998 = 100. Los incrementos representan pérdidas relativas de competitividad y las disminuciones aumentos de competitividad relativa. En el periodo 1998-2010, España es el país que pierde más competitividad y Alemania el que más gana. Fuente: European Commission.

Esto tiene graves consecuencias en el empleo. La rigidez de los costes laborales en España perjudican la competitividad de nuestra economía frente a otros países. De esta manera al estar indiciados los salarios a la inflación, además de implicar una mayor subida de la misma, provoca que los costes salariales para la empresa sigan aumentando. Esto provoca que a pesar de estar en un momento de crisis y de producir y vender menos y por tanto de tener menos beneficios, la empresa no puede hacer nada debido a la rígida negociación colectiva a la que está sujeta, teniendo que subir ese salario incluso aunque la empresa tenga pérdidas.

Esto provoca que la empresa se vuelva todavía menos competitiva respecto a otras empresas extranjeras, por lo que al aumentar los costes de producción, no puede competir en precios con otras compañías que son más flexibles y pueden adaptarse al mercado, lo que hará que no le compren sus productos al ser más caros y se verá por tanto abocada a realizar despidos masivos. Pero como otra rigidez laboral importante en España es el coste del despido, en muchos casos, el coste de esos despidos le obliga a cerrar la empresa, por lo que en lugar de producirse un número determinado de despidos, se cierra la empresa y se van todos al paro.

Una mayor flexibilidad laboral, como ocurren en otros países, permitiría reducir la jornada laboral del trabajador evitando los despidos masivos o bien reducir el salario del empleado coyunturalmente evitando así también los despidos. Al no poderse hacer aquí nada de esto, cuando se vive en España una recesión, el paro se dispara junto con el cierre de cientos de miles de empresas como ha sido el caso de esta crisis, y pese a todo, los costes laborales siguen creciendo, lo que sigue empeorando la competitividad española.
¿Es acaso mejor ser despedido a tomar una medida más flexibles, si la empresa va mal?

De ahí la importancia, como señalaba Angela Merkel que "los salarios deben subir sólo según las ganancias y beneficios". Es decir, vincular los salarios a la productividad.

Es lógico pues que los salarios suban si la empresa está en beneficios, pero lo que no tiene mucho sentido es que los beneficios de una empresa caígan un 50% y los salarios de sus trabajadores aumenten. El mantenimiento de esa situación acabará en desempleo irremediablemente, ya que si la empresa no puede realizar un ajuste por la vía de los salarios no le queda más remedio que hacerla por la vía del empleo.

No es lógico decir que eso es una pérdida de derechos del trabajador, si la consecuencia es perder el mayor derecho que pude tener un trabajador: El trabajo.

No es acaso mejor flexibilizar el mercado laboral para evitar lo que muestra este gráfico?
El propio Zapatero, ya ha reconocido "un sistema rígido es un mal sistema",



No hay comentarios:

Publicar un comentario

Twittear