lunes, 4 de febrero de 2013

Descomposición. (Política, Economía. 1.214)

Sobre la situación de corrupción política que hay, los intereses y situación política que se presenta y hacia el grado de descomposición a la que nos dirigimos por lo que exige la gente:

Artículo de Desde el Exilio:
"Caso Bárcenas.
Ni el PSOE ni EL PAÍS van a soltar la presa. Poco importa si es verdad o mentira o la gravedad de la corrupción en el PP. El PSOE y PRISA también están (presuntamente) corrompidos. Lo importante como en todo es la percepción de la gente y se ha hablado más de los papeles de Bárcenas en una semana que de los ERES del PSOE en los últimos dos años.
Rubalcaba ha dicho que Rajoy ha unido su destino al de Bárcenas pero el también lo ha hecho. Visto que sus propuestas económicas causan risas (¿por qué no lo hizo cuando estaba en el gobierno?), Rubalcaba sabe que su única posibilidad de sobrevivir en su propio partido es acabar por la vida rápida con el gobierno del PP, y eso sólo lo puede hacer con un escándalo de corrupción.
Dejando a un lado la (presunta) corrupción del PP, la torpeza de Rajoy ha sido la… acostumbrada. Actuando a la defensiva y siempre dos o tres pasos por detrás. ¡Dios! ¿Cómo ha llegado Rajoy a donde ha llegado?
Probablemente el caso Bárcenas no se concrete judicialmente en nada o casi nada pero ni eso ni la corrupción en sí son la cuestión. La cuestión es que se ha convertido en el punto de no retorno de esta legislatura, la declaración de guerra total contra el PP. Incluso de medios antes afines, como Intereconomía.
 Es la economía, estúpidos.
En las últimas semanas con la “relajación” de la prima de riesgo y la facilidad para colocar la deuda parece como si el fantasma de la intervención se hubiera desvanecido y estuviésemos en la antesala de la recuperación. Nada más falso.
El déficit del año pasado va a estar por encima de los 73.000 M€ y lo peor es que la idea de que hay que “flexibilizar” los objetivos de déficit se ha impuesto, y eso unido a la impopularidad de los “recortes” nos llevará a otro déficit similar este año.
Aunque las tímidas reformas han permitido una moderación salarial estamos muy lejos de la bajada de precios que sería necesaria para que nuestro sector exterior y el turístico tirasen (más) de la economía y generasen el empleo imprescindible para solucionar nuestros problemas. Nuestros políticos, todos, creen más en una recuperación, que vendría como por arte de magia, y en una inflación que diluirían la deuda pública.
Y mientras la plebe, cansada de la crisis, cada vez se vuelve más radical y estúpidamente anticapitalista: “los ricos son cada vez más ricos a costa de los pobres” “la culpa de la crisis es del capitalismo” “vivimos en una economía neoliberal”.
Cada 70.000 M€ más de déficit son casi 3.000 M€ más de intereses a pagar cada año y es menos dinero disponible para que los bancos presten dinero y que las empresas inviertan. De seguir así llegaremos a finales de 2015 con 1,05 B€ (Billones de euros) de deuda y pagando más de 40.000 M€ de intereses al año.
¿Cual será la situación después de las próximas elecciones? ¿Un parlamento fragmentado sin una clara mayoría? ¿Un tripartito, como en Asturias, con PSOE, IU y UpyD? ¿Qué política económica se hará cuando se han subido todos los impuestos a límites insoportables y no hay dinero en caja?
 Liquidación de España.
El nacionalismo en Cataluña ya solo puede sobrevivir si se produce la independencia en 2014. Es su única salida política y probablemente judicial. Y la (presunta) corrupción en el PP y la frustración de la gente ante la interminable crisis a ellos les viene estupendamente.
 La gente quiere más socialismo.
Si le dices a la gente que con un sistema liberal y a medio / largo plazo (20 – 30 años) España podría ser uno de los países más ricos del mundo o se ríen de ti o (más probablemente) te insultan.
Cuanto mayor es la crisis más se imponen las soluciones simplistas y estúpidas y más socialismo quiere la gente. Ya saben:
“el sistema bipartidista ha traicionado al pueblo pero si instauramos un sistema de elección directa por distritos y si eliminamos las Diputaciones y si acabamos con el fraude fiscal volveremos a tener dinero para que el Estado nos solucione los problemas y subvencione lo que haya que subvencionar y hay que meter en cintura a los bancos y a las grandes corporaciones para que sigan dando créditos y para que no se siga explotando a la gente y hay que apostar por las energías renovables que la electricidad es muy cara porque las compañías eléctricas son unas avariciosas y si no nacionalizamos la banca y las grandes corporaciones y la deuda pública es una estafa y no la pagaremos porque no nos da la gana…”
Es lo que hay señores. España no está sola en el mundo ni somos los reyes del Mambo y a este ritmo lo que nos espera es que ser una mezcla de Argentina y Yugoslavia.
El liberalismo no surge de las crisis sino de la reflexión. El socialismo es emocional el liberalismo racional y la gente ante el estrés de una crisis reacciona visceralmente. Y a eso hay que añadir unos medios de comunicación que falsean la realidad para adecuarla a su ideología (socialista, por supuesto).
 Descomposición.
Descomposición es lo que nos espera. Descomposición política, descomposición económica y descomposición territorial.
A veces desearía equivocarme."

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