lunes, 26 de noviembre de 2012

España paga una décima parte de todas las ayudas públicas mundiales para las renovables. (Energéticas. 109)

Las energías renovables están suponiendo una altísima factura, que crece sin freno año a año para la economía española, apoyada por las brutales subvenciones, cuyo coste de oportunidad es altísimo para el bienestar de la sociedad. 

Y el problema es ya tan grande y grave, que lleva a crecientes subidas e invenciones de impuestos para sufragar dicha factura, impactando negativamente en el empleo, la competitividad de la industria española, la factura energética, el ahorro y la capacidad adquisitiva de los españoles, el atractivo de inversión en España, y en recortar en otros muchos servicios, inversiones...mucho más productivos o necesarios:


"Los gobiernos de todo el mundo repartieron 88.000 millones de dólares (unos 68.300 millones de euros) en ayudas públicas para impulsar la utilización y el desarrollo de las energías renovables, un 24% más que el año anterior, según los datos de la Agencia Internacional de la Energía (AIE). 

Las cuentas públicas españolas soportaron solo el año pasado 6.900 millones de euros en primas a las energías del régimen especial (renovables y cogeneración). España concentró así en 2011 algo más de un 10% de todas las ayudas públicas que se concedieron a las energías limpias en todo el planeta. España es líder mundial en energía termosolar, está en el podio de la fotovoltaica (junto a Alemania e Italia) y es el segundo mayor productor de energía eólica del globo (solo por detrás del gigante Estados Unidos).
El lanzamiento y expansión de estas tecnologías, hasta el punto de convertir a España en una verdadera potencia global, ha requerido de subvenciones públicas. Los españoles han asumido como percepción generalizada y compartida (e incluso para muchos incontestable) que las ayudas a las renovables son exageradas y su ritmo de crecimiento de los últimos años imparable, a pesar de los recortes. Hoy uno de cada diez euros de ayudas públicas en todo el mundo es español. Y las estimaciones del Gobierno apuntan a que las primas renovables supondrán un sobrecoste para el sistema eléctrico de 70.000 millones de euros hasta 2020.
Al menos otros 7.220 millones en primas este año
El Ministerio de Industria decretó a principios de año una moratoria de los subsidios a las nuevas instalaciones de energías renovables. Todos los proyectos que no se encontraran entonces ya registrados o en construcción se han quedado sin ayudas. Sin embargo, entre enero y septiembre las primas a las energías del régimen especial alcanzaron los 6.945 millones de euros, más que en todo 2011, como consecuencia de la nueva potencia instalada en lo que va de año que sí accede a las ayudas. La previsión de la Comisión Nacional de la Energía (CNE) es que al cierre de 2012 el total de primas se sitúe en los 7.220 millones, aunque en los mentideros del sector se ve más que probable que se supere esa cifra.
El Ejecutivo se plantea nuevas fórmulas para recortar la factura de las renovables más allá de la moratoria a nuevos adjudicatarios. En principio, la solución lógica debería ser recortar las ayudas a las instalaciones que ya las reciben. La Comisión Europea ha advertido insistentemente a España de la imposibilidad de aplicar la tijera a las primas con carácter retroactivo. Entretanto, la reforma eléctrica que ahora se tramita en las Cortes no aborda el recorte de las subvenciones y durante el proceso el debate se ha centrado en el origen de los fondos que las cubrirán: el PP introdujo una enmienda para el 38% de las primas corrieran a cargo de los Presupuestos del Estado, pero posteriormente pactó con el PSOE que se financien con lo recaudado con los nuevos impuestos que en 2013 se aplicará a todas las tecnologías, verdes o no.
A la espera de impulsar una verdadera reordenación del sector, el Gobierno ha creado nuevos impuestos para las compañías energéticas como primer paso para tapar el agujero eléctrico. El sistema eléctrico acumula un déficit de tarifa (la diferencia entre los costes de generación y los ingresos para financiarlos) que alcanza ya los 24.000 millones de euros. Entre enero y septiembre, el déficit se ha incrementado en más de 3.900 millones, a pesar de que el límite legal para el conjunto del año es de 1.500 millones. El Gobierno, no obstante, asegura que con las nuevas medidas se cumplirá el objetivo que de que el año próximo el desfase entre ingresos y costes sea cero. "
Fuente: Expansión

No hay comentarios:

Publicar un comentario

Twittear