viernes, 12 de abril de 2013

Entrevista con Jorge Valín: “La UE es cada vez más una dictadura de tecnócratas” (Política, Economía. 1.423)

Gran entrevista de Diego Sanchez de la Cruz a Jorge Valín sobre los gobiernos y sus mentiras para mantener sus privilegios y nuestra sensación de dependencia:


"Economista español seguidor de La Escuela Austriaca y del Anarcocapitalismo. Colaborador y articulista en el Instituto Juan de Mariana, Instituto de Libre Empresa (ILE), Liberalismo.org, Fundación Atlas, Fundación Friedrich Naumann, Poder Limitado, Libertad Digital, Punto Radio, AIPE, entre otros medios e instituciones. Hablo, por supuesto, de Jorge Valín, que acaba de lanzar con gran éxito su libro “El gobierno es el problema“, obra en la que se ha propuesto explicar “por qué nada funciona en manos de los políticos”. En la entrevista que podrán leer a continuación, Jorge repasa algunos de los aspectos presentes en la obra. Pueden comprar el libro haciendo click aquí. Así mismo, no dejen de seguir al autor en Twitter.
Defender el enriquecimiento o la propiedad privada no está bien visto en España. Por otro lado, se afirma de modo recurrente que la solución a nuestros problemas está en “más Estado y menos mercado”. ¿Cómo explicar la superioridad de un sistema económico en el que la mayoría no cree?
JV: La gente ha de convencerse sola. No creo que sea la función de ningún liberal sea convertirse en mesías o redentor de la sociedad. El socialismo simplemente no funciona. Es la ley de la jungla donde todo el mundo quiere vivir del resto a base del uso de la fuerza de un mercenario, el Estado, que cobra en votos. Los pensionistas quieren que les suban sus pensiones a costa del desempleado. El desempleado quiere que le suban su subsidio a costa de las subvenciones a los agricultores. Los agricultores que les paguen más dinero por sus mercancías a costa de otras partidas… y así hasta el infinito. Un sistema basado en la distribución total solo genera tensión social y pobreza. Pero el Estado del Bienestar y la Democracia no funcionan porque, además, el Gobierno siempre usará el dinero usurpado al ciudadano para aumentar su tamaño y privilegios. Al final, la gente aprenderá por las malas. Tendrá que ver que el sistema no funciona y dejar de depender del Gobierno como un drogadicto para ganar más individualismo y cooperar con el resto de la sociedad en lugar de vivir a expensas de ésta.
Su libro lleva semanas encaramado al Top 10 de libros digitales sobre política y economía.  ¿Significa esto que, aunque sea de forma minoritaria, hay una “indignación” y una reacción liberal en España?
JV: Hace diez años el liberalismo en España era inexistente. Las cosas han cambiado. Ha crecido. Veo mucha gente joven encantada con la idea más libertad y autonomía personal. Lo que es más importante, su visión radical, el anarcocapitalismo o desaparición total y absoluta de toda forma de Gobierno,  también aumenta. Este cambio se debe, como me han dicho muchos, por un desengaño del Estado del Bienestar y la Democracia. Y este desengaño irá creciendo.
¿Qué opina sobre el rol del Banco Central Europeo y de la Unión Europea en toda esta crisis?
JV: La Unión Europea es una de las mayores amenazas contra la libertad de las personas. Incluso ya ha roto con el formalismo democrático. Aprueba leyes sin que la sociedad lo sepa y ha creado un sóviet como la Troika que decide en un fin de semana sobre la suerte de un país. Pero además, es ineficiente y crea más inseguridad al aprobar dictámenes improvisados que incluso violan los propios fundamentos de la UE. ¿Dónde queda la libre circulación de capitales de la UE en el caso de Chipre que los han restringido? La UE es cada vez más una dictadura de tecnócratas. Igual ocurre con el BCE que mueve los mercados a base de comentarios y favoreciendo a lobbies como la banca.
Vd. intenta llamar la atención en su libro y en sus ensayos sobre el peso del Estado en nuestros bolsillos. ¿En cuánto lo estima si hablamos de impuestos y gasto? ¿Y si consideramos también la deuda pública?
JV: El Gobierno ingresa unos 10.500 euros por ciudadano, que significan unos 28.000 euros por familia. Lo que la gente se ha de preguntar es si el Estado le devuelve esa cantidad a cada uno en servicios y prestaciones. La respuesta es que no. Ese dinero se usa para pagar a lobbies, rescatar bancarios, autopistas y para el propio crecimiento del Gobierno y sus privilegios. Pero no satisfechos con esta gran incautación, debemos al Gobierno unos 20.000 euros en concepto de deuda, casi 50.000 euros por familia. Es una hipoteca oculta. Un fraude.
Grandes sectores de la economía tienen en el Estado a su principal proveedor. Lo vemos en la Sanidad, las Pensiones, la Educación… ¿Qué efectos tendría liberalizar, privatizar y flexibilizar estos ámbitos?
JV: No se ha de privatizar nada, se ha de desnacionalizar todo. Esto es, que el Gobierno se aparte, del todo, absolutamente y para siempre del mundo civil y económico. Los ministerios de Economía, Educación, Sanidad… han de ser abolidos y desaparecer. La privatización ya hemos visto qué es. Es traspasar un monopolio estatal a otro privado, esto es Capitalismo de Amigotes. Desprendernos del Estado del todo significa que no dependemos de dictadores de la producción, sino volver a la economía voluntaria.
Al no haber barreras como impuestos, licencias, “sobres”, permisos, leyes discrecionales… la competencia aumentaría en todos los sectores, educación y sanidad entre ellos. El mercado ganaría en diversidad creando varios tipos de precios por cada servicio y alternativas que se ajustarían a cada persona. Cada familia pagaría justamente por aquello que consume, y no como ahora donde estamos pagando los servicios de personas que ni conocemos por el uso de la fuerza del Estado a un enorme sobreprecio que solo beneficia al Gobierno y sus lobbies.
En el libro explica Vd. cómo el Estado trabaja continuamente para justificarse a sí mismo. ¿Qué actitud, qué cambio de mentalidad debemos adoptar para ser capaces de responder mejor a semejante reto?
JV: Con ver la realidad bastaría. Todas las promesas del Estado son falsas. No se puede conseguir mayor bienestar, empleo, riqueza o erradicar la pobreza a base de leyes, imposiciones ni subvenciones. Las personas han de darse cuenta que solo su esfuerzo personal y responsabilidad son las únicas armas para vivir mejor.
Hay en España un clima político cada vez más volátil. ¿Hemos visto ya la degeneración total del sistema o aún cree posible que el populismo y la demagogia vayan a más?
JV: Mientras la gente crea en la magia de la política y que mediante el uso de la fuerza, leyes y subvenciones, se puede arreglar el mundo, el populismo aumentará.
PP y PSOE están de acuerdo en que el Estado tiene un problema de ingresos, lo que ha legitimado decenas de subidas de impuestos desde el comienzo de la crisis. ¿Es este diagnóstico correcto o, por el contrario, el verdadero problema está en el gasto?
JV: EL auténtico problema es el Gobierno, su existencia. No produce nada, solo distribuye rentas, lo que arruina a la sociedad premiando al parásito y castigando al productivo. Los impuestos son  moralmente inaceptables porque son un robo, y como es así, económicamente no puede funcionar tal sistema. Simplemente hay que mirar, por ejemplo, la evolución del consumo minorista y los puntos donde el Gobierno ha subido impuestos. La repercusión ha sido inmediata. En el último aumento del IVA (septiembre 2012) el consumo minorista paso del -2,6 al -13,6. La mayor caída del índice. El problema es que el Gobierno jamás hará ningún esfuerzo real para hacerse pequeño. Es absurdo creer que usará políticas que le mutilen. Ni políticos que muchos consideran liberales, como Thatcher o Reagan, lo hicieron. El Gobierno siempre crece. Desgraciadamente, al Estado no le importan estas repercusiones porque solo piensan en el corto plazo y recaudar, y teniendo en cuenta que los presupuestos de este año son tan reales como el cuento de Blancanieves, habrá otra subida de impuestos este año; posiblemente en otoño."
Fuente: Diego Sanchez

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