Un hecho más que preocupante, que era solo cuestión de tiempo, como consecuencia de la persecución constante al ahorro por parte del Estado, que busca incentivar de la manera que sea (y esa fue la causa de la gran crisis que padecemos) el gasto, crédito y consumo, penalizando para ello el ahorro.
Un ahorro, precisamente que es lo más necesario para salir de la crisis y permitir un crecimiento sano y sostenible, permitiendo una mayor capitalización de la economía, que devenga en productividad, inversión eficiente en la asignación de recursos, salarios reales más altos, menor inflación...
Sin embargo los políticos rehuyen todo esto, pues pretenden salidas rápidas, vistosas (y que haga pensar que hacen mucho para ello) y cortoplacistas (que les beneficie, aunque las consecuencias a largo plazo sean peores o aunque no se resuelvan así los problemas o causas que nos han traído aquí).
Por ejemplo, intentando resolver un problema de deuda con mucha más deuda, o un problema de malas inversiones y gasto, con más inversiones y gasto (aunque sea innecesario), que lleva a una mala asignación de recursos, lo que provoca burbujas y posteriormente el estallido de la misma.
A su vez, se suben más y más impuestos (para evitar reducir cualquier gasto público) que siempre justifican como imprescindible (aunque o bien antes ni existía dicha partida, o su nivel era muy inferior, o su nivel se ha reducido desde el pico ligeramente, pero tras haber subido drásticamente durante muchos años antes). Esto conlleva a una menor renta disponible de las familias y por tanto menos capacidad para hacer frente a las deudas (con graves consecuencias) o a consumir lo que más falta les hace (que decide el político por ellos despilfarrando y llevándose entre ellos y los múltiples burócratas gran parte para sí mismos).
Artículo de Infolibre:
La tasa de ahorro de los hogares e instituciones sin fines de lucro se situó en el -1,9% de su renta disponible en el primer trimestre, con lo que entró por primera vez en negativo desde el año 2000, cuando comenzó a elaborarse la serie, según ha informado este miércoles el Instituto Nacional de Estadística (INE).
Estadística ha explicado que en el primer trimestre los hogares españoles gastaron 2.987 millones de euros más de lo que ingresaron, de manera que el ahorro bruto se cifró en -2.987 millones de euros, frente a los 4.036 millones de euros del mismo trimestre de 2013.
En concreto, la renta disponible de los hogares se redujo un 2,7% en el primer trimestre en tasa interanual, hasta los 157.661 millones de euros, mientras que el gasto en consumo fue de 160.556 millones de euros, un 1,9% más que entre enero y marzo de 2013.
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