lunes, 14 de abril de 2014

El sector público sólo pierde 2,5 empleos por cada 100 destruidos en la crisis

Lo más increíble es escuchar que pese a que de cada 100 empleos perdidos con la crisis, y que solo 2,5 pertenezcan al sector público (con autonomías que incluso lo han aumentado), el sector público es el que está sufriendo la crisis, y están "yendo a por ellos". 

Y otro elemento importante a considerar es que el empleo público en España es superior al del resto de países considerando el porcentaje sobre la población activa (en edad de trabajar), ya que se emplea interesadamente sobre la población total, o el del gasto salarial de las plantillas públicas en España, cuyo coste y esfuerzo para el español de a pie es superior al del resto en Europa. 


Y por último, y que muestra la situación de insostenibilidad y de mayor esfuerzo impositivo (con grandes implicación en la competitividad y la creación de empleo) al sector privado para mantener el empleo público actual es la relación entre ocupados en el sector privado-público.

Por no hablar de otro tema más que importante al respecto, y no citado en el artículo, como es el nivel salarial del empleado público en España respecto al del sector privado, cuyo diferencial es muy superior al que se produce en el resto de Europa, cuyos salarios en el sector privado son superiores, y por tanto el esfuerzo para mantener los salarios públicos mucho menor. 

Artículo de El Economista:

"De los cerca de tres millones de empleos que han desaparecido en España desde el primer trimestre de 2007, un total de 2,64 millones eran privados, por tan sólo 136.400 públicos. O lo que es lo mismo: por cada cien puestos de trabajo perdidos hasta el cuarto trimestre de 2013, la Administración tan sólo prescindió de 2,5, mientras que las empresas realizaron la inmensa mayoría del ajuste, al suprimir prácticamente 97,5 empleos de cada cien.

Así se concluye de las cifras de la Encuesta de Población Activa (EPA), según las cuales a comienzos de 2007 había en España 2,93 millones de asalariados públicos, frente a 13,58 millones de personas empleadas en el sector privado. Al cierre del cuarto trimestre de 2013, la misma fuente estadística daba cuenta de 2,79 millones de trabajadores en nómina de las Administraciones Públicas, en tanto las empresas privadas ocupaban a 10,95 millones.

Junto a esta desproporción en la radiografía del empleo erosionado, que muestra cómo la plantilla pública apenas ha bajado, se da la circunstancia de que existen incluso autonomías que la han ampliado, como constata Asempleo. Según esta patronal, pese al ajuste acometido en la Administración, Cataluña (+7,6%), Navarra (+6,9%), Murcia (+5,9%), Baleares (+5,4%), Cantabria (+4,6%) y Andalucía (+0,9%) tienen ahora más trabajadores a sueldo que en el tercer trimestre de 2007.

Tamaño según fuerza laboral


En España hay menos empleados públicos que en Europa, si la vara de medir es la población total, y así lo atestigua Eurostat. En concreto: el 2,6% (1,23 millones) de la población española trabaja en el sector de la Administración Pública, Defensa y Seguridad Social, mientras la media de la UE y la Eurozona es mayor (3%) y hay quienes la superan, como Alemania (3,5%) o Luxemburgo (4,9%). La cifra de Eurostat de 2013 es inferior a la de la EPA, pues la oficina europea no incluye personal educativo ni sanitario.

Ahora bien, para evaluar el peso del empleo público, lo más preciso es hallar el porcentaje sobre la población activa. En este caso, los asalariados de las AAPP son el 13,1% de la fuerza laboral de España (22,65 millones totales y 16,75 ocupados, según la última EPA), a tenor de un informe de la OCDE, que significa 2,5 puntos porcentuales más que en Alemania (10,6%) y 2,4 más que Austria (10,7%).

No extraña que dos de los adalides de la austeridad tengan en este caso menor porcentaje público, pero que también en Grecia (7,9%) y en Portugal (11,5%) el empleo público represente una menor proporción de la fuerza laboral, es llamativo.

Asimismo, hay que tener en cuenta que pagar a su plantilla le cuesta más a España, por la desventaja en recaudación tributaria y las magnitudes del déficit o la deuda pública. Así, con las cifras de la OCDE, las Administraciones españolas pagaban en 2011 la nómina del 13,1% de la población activa, con una recaudación del 35,7% del PIB, un abultado déficit del 9,4% y una deuda del 77%. Mientras, Alemania sufragaba los sueldos del 10,6% de la fuerza laboral, con ingresos superiores (44,6% del PIB) y un déficit del 0,8%.

Otro dato que juega contra España es que, según la Organización Internacional del Trabajo, hay 4,8 ocupados en el sector privado por cada uno público, en tanto que, por ejemplo, Alemania tiene 6 privados por cada uno público. Ni que decir tiene que, cuanto más se incline la balanza del lado privado, mayor competitividad empresarial y menor coste para las arcas públicas.



Eficiencia más que números


Como señala la analista de Funcas María Jesús Fernández, la clave no está tanto en el número de asalariados de las AAPP, sino en "reorganizar el funcionamiento del sector público de forma que con menos empleados se pueda hacer lo mismo o más". Para esta experta, hay otros países europeos que tienen pendiente "un esfuerzo importante por hacer a este respecto". Y cita a Francia, donde el sector público "tiene un tamaño muy elevado".

En el capítulo de lo realizado, es innegable que las AAPP han hecho un ajuste laboral: vacantes no cubiertas, planes de despido de interinos autonómicos, reducción del sector público empresarial, etc. Pero también es cierto que en los primeros años de crisis, mientras subía el paro en el sector privado, crecía la plantilla pública. Un hecho que corrobora un informe de la Presidencia irlandesa de la UE, según el cual diez países europeos, entre ellos España, registraron un incremento en el número de empleados públicos entre 2006 y 2012."

No hay comentarios:

Publicar un comentario

Twittear