jueves, 23 de abril de 2020

Las cifras oficiales de Sanidad dejan fuera una de cada tres muertes del coronavirus

Jesús Escudero muestra en el siguiente artículo cómo las cifras de Sanidad dejan fuera una de cada tres muertes del coronavirus en España. 

Artículo de El Confidencial: 
Foto: Un operario del cementerio de Santa Margarida de Montbui (Barcelona) introduce un féretro en un nicho el pasado 1 de abril. (EFE)Un operario del cementerio de Santa Margarida de Montbui (Barcelona) introduce un féretro en un nicho el pasado 1 de abril. (EFE)
El pasado 8 de abril, este diario detallaba en un artículo explicativo por qué las cifras oficiales de fallecidos por el coronavirus están infraestimadas. El titular era muy claro: "No, no hay 14.000 muertos por covid sino muchos más (aunque Sanidad no lo admita)". Una vez que la inmensa mayoría de los registros civiles han notificado ya todas las defunciones registradas hasta ese día —independientemente de la causa—, los datos actualizados del Sistema de Monitorización de la Mortalidad diaria (MoMo) analizados por El Confidencial también lo ponen de manifiesto: entre el 17 de marzo y el 8 de abril, las tres semanas de mayor virulencia del covid-19, hubo un exceso de mortalidad de 22.000 defunciones (85% sobre el valor habitual para estas fechas). En otras palabras: la estadística oficial dejó fuera una de cada tres muertes asociadas al coronavirus durante ese periodo.
El modelo matemático del sistema MoMo estimaba que unas 25.800 personas iban a morir en España durante esos 22 días. Pero en esas tres semanas, el coronavirus hizo saltar por los aires cualquier previsión de mortalidad basada en algoritmos y series históricas. Finalmente, unas 47.800 personas fallecieron entre el 17 de marzo y el 8 de abril, ambos inclusive, lo que supone un exceso de mortalidad de 22.000 fallecimientos (85%) respecto de los valores previstos por el MoMo para esas fechas. Este número contrasta con la cifra oficial de 14.750 muertos por coronavirus en las mismas fechas obtenida de los informes diarios de Sanidad.
Esta diferencia de 7.200 muertes entre el dato del Ministerio de Sanidad y las defunciones registradas en el MoMo puede explicarse tanto por fallecidos por coronavirus a los que no se les hizo pruebas PCR, y por tanto no figuran en la estadística oficial, como muertes indirectas de pacientes que no pudieron recibir atención por la saturación sanitaria provocada por la pandemia. Este exceso de mortalidad adicional a las cifras oficiales de Sanidad es patente en las tres comunidades más afectadas por el covid-19: Madrid y las dos Castillas. Estas últimas, junto a Navarra, tienen la peculiaridad de que las defunciones no incluidas en la estadística oficial superan el dato ofrecido por el ministerio.

Si analizamos con más detalle este exceso de mortalidad no recogido en las cifras de Sanidad, vemos que cada día los registros civiles anotaban entre 200 y 400 muertes más de las que daban el Gobierno y las comunidades autónomas. Por ejemplo, el último día de marzo, se registraron 2.474 defunciones en toda España, cuando se esperaban 1.120, lo que significa un exceso de 1.355 (121%). El Ministerio de Sanidad informó de que ese día hubo 864 muertes de coronavirus, por lo que casi 500 quedaron fuera de la estadística oficial.

Esta diferencia entre la cifra oficial de fallecidos y las defunciones inscritas en los registros civiles no se ve solo en España sino en muchos más países. Como ha publicado esta semana 'The New York Times', en Francia, la diferencia entre la estadística oficial y el exceso de mortalidad detectado es de 6.500 defunciones (45%); en Inglaterra y Gales, de 6.300 (38%); en Nueva York, de 4.000 (38%), y en Países Bajos, de 1.900 (47%). Para España, ve una diferencia de 7.300 muertes, coincidiendo con el resultado del análisis de El Confidencial, aunque para el periodo comprendido entre el 9 de marzo y el 5 de abril.
En el caso de Francia y Reino Unido, son los institutos nacionales de estadística los que publican las muertes registradas cada semana y su comparación con la media histórica de los últimos años. En una entrevista en Onda Cero, el presidente del INE, Juan Manuel Rodríguez Poo, rechazó adelantar la cifra provisional de defunciones, que se publicarán a finales de 2020, tal y como está previsto en el calendario del INE.

Las muertes semanales se duplicaron

Los informes que se publican cada día a partir del sistema MoMo tienen un "carácter provisional" debido al posible retraso en las notificaciones de los registros. "Tanto los datos de defunciones observadas como los excesos detectados por el sistema MoMo pueden variar en cada actualización", afirma. Ello se aprecia en el primer gráfico de los informes del 7 y el 21 de abril: el primer día el pico de fallecimientos alcanzaba los 2.150 muertos, mientras que el último informe lo sitúa cerca de los 2.500. Esta cifra se ha actualizado tras recibir las notificaciones de defunciones que estaban atascadas en los registros civiles.
Pese a sus limitaciones —deja fuera al 7% de la población española adscrita a registros civiles presenciales y los datos más recientes (especialmente, los de las dos últimas semanas) tienen un carácter provisional por los retrasos en las notificaciones—, el sistema MoMo permite "identificar patrones inusuales de mortalidad y estimar el impacto en la mortalidad de la población de cualquier evento de importancia [como la pandemia del coronavirus] para guiar la acción en Salud Pública". De acuerdo al análisis realizado por El Confidencial, el exceso de mortalidad en las tres semanas de mayor incidencia del covid-19, del 17 de marzo al 8 de abril, ha sido del 85%, si bien en el informe del 7 de abril se advertía un exceso de mortalidad del 57%. Este incremento se debe a la incorporación de las defunciones retrasadas al sistema MoMo durante los últimos días, lo que permite calcular el exceso de mortalidad de forma más ajustada a la realidad.
En las dos semanas de mayor mortalidad del coronavirus (la del 23 al 29 de marzo y la del 30 de marzo al 5 de abril), el número total de muertes inscritas en los registros civiles informatizados duplicó las notificadas para las misma semanas de los dos años anteriores, mientras que durante la Semana Santa se apreció un ligero descenso en la mortalidad nacional, aunque todavía muy por encima de lo habitual para esas fechas del año.

Por comunidades autónomas, Madrid cuadruplicó las muertes esperadas para las tres semanas que van del 17 de marzo al 8 de abril; Castilla-La Mancha las triplicó, y Castilla y León, Navarra y La Rioja las duplicaron. Por su parte, Cataluña, Aragón, Extremadura y País Vasco registraron excesos de mortalidad por encima del 65%. El resto de regiones experimentaron excesos por debajo del 35%.
























No hay comentarios:

Publicar un comentario

Twittear