lunes, 20 de enero de 2020

La ideología de género al rescate de un pedófilo: «Soy una niña de 8 años»

Una de las consecuencias de la anticientífica ideología de género, por ir contra la biología y distintas otras ramas científicas es precisamente la legitimación de la pedofilia (esto por otro lado lo defienden algunas de las más importantes ideólogas de género, como Simone de Beauvoir, Shulamith Firestone, Kate Millet o Lola Pérez en España, que marcan la agenda ideológica del feminismo de tercera hola, hegemónico hoy, y de hecho ya existen movimientos en su defensa y que exigen su despenalización). 

Y es que dicha ideología afirma que el sexo y el género son constructos sociales, y que la ciencia no puede decir nada sobre lo que es la persona, sino que es una cuestión subjetiva de las propias personas, de su sentir, y que es una fobia no hacerle caso. Así, si alguien se siente mujer sin demostración científica de ningún tipo se le debe considerar como tal...abriéndose la puerta a cualquier otro tipo de identidad. La edad no la marca tu cuerpo, la ciencia, sino tu autopercepción (el pedófilo se siente un niño de 8 años, por lo que no se le puede culpar como adulto). Y así podemos continuar, y de hecho ya está ocurriendo (ser un gato encerrado en el cuerpo de una mujer...). 

Juan Robles informa del caso en el siguiente artículo. 
Artículo de Actuall:
Joseph Gobrick, 45 años. Con grandes gafas, la frente despejada y una coleta rubia en la nuca, sin apenas inmutarse, ha dicho ante un juez en la ciudad norteamericana de Grand Rapids: «Siempre he sido una niña de ocho años. Incluso en mis dibujos y fantasías».
Es todo lo que ha alegado tras ser condenado a 20 años de prisión por secuestro de una menor y posesión de pornografía infantil. El caso se descubrió en 2018, cuando la Policía halló en su vivienda a una menor, de 17 años, que se encontraba desaparecida.
Al registrar la casa, los agentes encontraron varias imágenes de abuso infantil en las que se identificaron hasta 8 víctimas. Algunas de ellas eran bebés agredidos sexualmente. Y no es la primera vez que se enfrenta a cargos de este tipo. Ya en 2001 fue reo de otro delito de abuso y posesión de imágenes sexuales de menores.
El juez no sólo tuvo que asistir a la negación de la propia naturaleza de Gobrick, sino que además tuvo que hacer frente a otra línea «argumental» de la defensa del condenado: «No tendría sexo con un niño del mismo modo que no lo haría con una serpiente de cascabel. No es seguro», dijo refiriéndose a la posibilidad de ser detenido, tal y como recoge CBN.
El fiscal del caso, Daniel Helmer ha referido cómo «incluso durante el juicio continuó dibujando, hablando de violar bebés en la cárcel del condado de Kent y haciendo otras declaraciones sobre cómo este es su derecho constitucional a seguir haciéndolo.

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