Pues dicha libertad económica con los principios que le acompañan (propiedad privada, seguridad jurídica, respeto a contratos, incentivos a la generación de riqueza y la innovación...) permite una mayor generación de riqueza aumentando la capacidad para afrontar problemas medioambientales, a mejorar la eficiencia productiva, la mejora tecnológica en favor de eficiencia energética y alternativas limpias, el hacer frente a daños o el controlarlos... y a su vez, la mejora de la riqueza, que permite superar la satisfacción de necesidades básicas, permiten al humano poner en el punto de mira objetivos antaño secundarios (primero es la supervivencia), tales como el medio ambiente, dotándole de medios y tiempo para su mejora.
La correlación de estas todas estas variables está más que demostrada, pero para los enemigos de la libertad, da igual...
El siguiente vídeo e imágenes muestran el desastre ecológico experimentado en Haití, uno de los países más pobres del mundo.
"Más de 10 billones de Kilos de basura son tirados cada año al mar, la mayoría plástico, en donde aproximadamente 1 millón de aves marinas y 100000 mamíferos marinos, mueren cada año a causa de la contaminación. (Estadística Mundial)."
Fuente: Imágenes de Pòtay Leyogàn, Puerto Principe, Haití, vía Hervé Saintilus y @dezabedrosky on Instagram
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