El radicalismo ideológico de género sigue avanzando hacia el mayor de los absurdos.
La dictadura de lo políticamente correcto está haciendo estragos en la sociedad, y no acabará nada bien...
Lo que acaba de suceder en Australia en una competición internacional de levantamiento de pesas es un paso más en el despropósito.
Un levantador de pesas de Nueva Zelanda que competía antes como hombre, ahora gana de calle en un campeonato de mujeres, porque ahora se siente mujer. Ahora es trans y revienta los récords nacionales ganando la competición por más de 20Kg de diferencia ante la mejor mujer biológica.
Más triste es observar a las rivales no pudiendo decir nada al respecto, más que tener que resignarse sin estar de acuerdo...
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