“Hacienda se quedó con más de 700.000€ de mi premio en Pasapalabra”

Paz Herrera es la ganadora de uno de los mayores "botes" de la historia de España, en el programa Pasapalabra. 

Herrera, que ganó 1.300.000 € en el programa gracias a su esfuerzo mental, tendrá que destinar 700.000€ (el 54%) a Hacienda. Es decir, que el Estado se queda con más que el responsable del éxito. 

"El año que gané el bote, estuve trabajando desde el 2 de enero y concluí la grabación a mediados de abril. Era ir todas las semanas a Madrid y grabar 9 programas, tres diarios, acabas exprimido."

Pero en España se pagan pocos impuestos, y hay que subirlos hasta el infinito. Y todo y así, tenemos un déficit incorregible de cerca de 50.000 millones en 2015 debido al mastodóntico nivel de gasto público, con las negativas consecuencias que ello conlleva.

La expropiación de lo tuyo y el robo institucionalizado en estado puro, para nunca cumplir las promesas ni resolver los problemas, sino crear enriquecimiento propio, corrupción, leyes clientelares, dependientes del sistema y del político y destruir la capacidad de generación de riqueza del país. 

También destaca su comentario sobre en qué empleó el premio: "Nada especial, porque pueden pensar que medio millón de euros da para muchísimo, pero si quieres asegurarte la jubilación futura, tal y como están las cosas, porque trabajo no hay, pues no puedes tocarlo."

Otro elemento que evidencia la realidad del sistema. Un sistema que primero no te deja ser independiente, ahorrando y acumulando para cubrir tus necesidades y prevenir el futuro, dados los elevadísimos impuestos y las políticas de persecución del ahorro, haciéndote así menos independiente y más dependiente del político y su sistema impuesto (eso implica mantener su poder). 

Unido a las consecuencias negativas de la intervención y pésima regulación laboral, que implican una tasa de paro cercana al 20% década tras década y un perverso sistema de pensiones (estafa piramidal) arrebatado a la sociedad civil e impuesto también por el poder político que crea más dependientes del sistema, ofreciéndoles cada vez menos mientras les quita cada vez más (sin además poder ahorrar tu dinero incrementándolo mediante capitalización, ni dejar en herencia tu dinero ahorrado para la pensión si falleces, ya que se lo queda el estado, al contrario que en el sistema de capitalización).